El autocuidado como centro de nuestra incidencia política
Mujeres buscadoras, defensoras y periodistas provenientes de Chihuahua, Guanajuato, Jalisco, Oaxaca y San Luis Potosí se reunieron en esta Ciudad de México para reconocer la importancia de su labor, acuerparse frente al riesgo que enfrentan y reafirmar el autocuidado como el centro de la incidencia política.
Las 50 mujeres de diferentes contextos y luchas, reconocieron que el riesgo que enfrentan suma el ser mujeres y realizar la defensa de derechos humanos en un marco de violencia e impunidad estatal.
De acuerdo con la Red Nacional de Defensoras de Derechos Humanos, durante 2024, sucedieron mil 622 agresiones en contra de al menos 286 defensoras y 21 organizaciones o colectivos de defensa de derechos humanos en México.
La violencia se agudiza. De acuerdo con CIMAC, durante el sexenio de Andrés Manuel López Obrador, se cometieron mil 189 casos de violencia contra mujeres periodistas, un aumento de 117% respecto de Enrique Peña Nieto.
Las defensoras buscadoras enfrentan un preocupante contexto de riesgo y agresión en México. En el marco del Día Internacional de las Víctimas de Desapariciones Forzadas, conmemorado el 30 de agosto, el Espacio OSC, reportó que desde el 1 de enero de 2016 han sido asesinadas o desaparecidas 15 defensoras de derechos humanos.
La única respuesta institucional es el Mecanismo de Protección para Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas en el que las defensoras viven revictimización y el otorgamiento de medidas de protección sin perspectiva integral.
Ante el abandono de las autoridades, sus fuerzas son ellas mismas. El autocuidado desde una mirada política y feminista les permite recordar que en el centro de la defensa de derechos humanos se requiere bienestar y descanso. Tejer redes es una apuesta política para sostenerse frente a la desesperanza.
En el Encuentro Nacional de Mujeres Periodistas, Defensoras y Buscadoras reconocemos la importante labor de defensa de derechos humanos de las mujeres que se realiza ante la omisión y falla del Estado que muchas veces es el agresor. Exigimos una vida libre de violencia para todas, el fin de la impunidad en cada uno de los casos que enfrentamos y el fortalecimiento del Mecanismo de Protección para una protección integral y feminista.